17 May Así debes lavar tu ropa de deporte para que no huela mal

Seguro que os ha pasado esto alguna vez. Estás a punto de salir a practicar tu deporte favorito. Estás al 100%. Motivad@, y con ganas de darlo todo. Pero justo cuando te pones tus mallas y camiseta técnica favoritas, lo hueles. ¡Qué mal olor!

La ropa deportiva es la más propensa a desarrollar malos olores, y esto no solo puede derivar a tu malestar olfativo mientras entrenas, sino también a picores, moho, hongos y otros problemas con la piel.

Estos son los pasos que deberías seguir para que tu ropa de deporte quede bien limpia, libre de hongos y de males olores.

• No esperes que se seque después de usarla

Una vez llegues de entrenar, con toda la ropa empapada, no dejes que pase mucho tiempo mojada. Hay que tener mucho cuidado con esta ropa, pues está diseñada para capturar la humedad. Y con la humedad, aparece el moho, que es el principal causante del mal olor. Así pues, toca lavarla cuanto antes.

• Dale la vuelta

Cuando vayas a meterla en la lavadora, dale la vuelta. De esta forma ayudarás a que el agua y al jabón penetre más en los tejidos. A parte, evitarás que los adornos de la ropa, como logotipos, bandas reflectantes o cremalleras se estropeen.

• Usa agua fría

Algunas lavadoras ya tienen un programa pensado para prendas de deporte. Si no es tu caso, usa agua fría, máximo a 40º, y un programa más bien corto.

• Usa jabón con Ph neutro

Procura utilizar un detergente o jabón con Ph neutro. De esta forma no estropearás el tejido de tu ropa deportiva. De la misma forma evita por todo lo alto el uso de suavizante. En tu supermercado también encontrarás detergentes específicos para ropa deportiva.

• Secado mejor en el aire libre

Procura dejar el menor tiempo posible tu ropa mojada dentro de la lavadora. Recuerda que la humedad es lo que produce el moho, y este los malos olores. Cuélgala al aire libre, y si es posible, en un lugar donde toque el sol.

Por otro lado, otra parte de tu equipo que también necesita unos cuidados mínimos son tus zapatillas de correr o botas. Tu calzado, al igual que el resto de tu ropa, puede desarrollar no solo malos olores fácilmente debido a la humedad, sino también hongos que pueden derivar a pie de atleta. Es por eso que cada vez que termines de usar tu calzado deportivo debes:

• Descalzarte cuanto antes

Una vez más, la humedad es la principal fuente de problemas. Cuanto menos tiempo esté húmeda, menos probabilidades habrá de que desarrolle malos olores.

• Abrir la lengüeta y aflojar los cordones

De esta forma facilitaremos su secado, para que el aire fluya fácilmente.

• Sacar la plantilla

La plantilla es una de las partes más blandas y absorbentes de los calzados, y también de las que acumula más humedad. Si es posible (pues algunos zapatos la llevan pegada), sácala para que se seque a parte.

• Dejarla al aire libre

Cómo con la ropa, procura que se seque al aire libre, en un lugar el máximo de seco posible.

Si sigues estos pasos podrás disfrutar de muchas sesiones de deporte con tu ropa y evitarás momentos incómodos con el mal olor, o picores muy molestos que pueden estropear un entreno. Practicar deporte con el equipo adecuado y en buenas condiciones no hará solo que disfrutemos más de nuestros entrenos, sino que los practiquemos de forma más segura, pues tendremos toda nuestra atención depositada en el ejercicio en sí.